A estas alturas de la película, son muchas las empresas que conocen, en nuestro país, el hábito que tiene la gente a la hora de comer y beber. Saben lo que nos gusta en el interior de nuestras fronteras y esa es una necesidad básica para que esos productos se puedan seguir elaborando. Los estudios de marketing y de publicidad son básicos en este sentido e indican que productos como la cerveza o el cava están bastante bien valorados en el interior de nuestras fronteras. No nos extraña que, por tanto, su elaboración siga siendo una actividad importante dentro de nuestro país.
Sin duda, estamos hablando de dos bebidas que están muy asociadas al ocio de las personas que pueblan nuestros pueblos y ciudades. Y eso hace que su consumo sea interesante. La cerveza es una constante en todos y cada uno de los bares y restaurantes españoles. El cava es cierto que se usa en ocasiones más especiales, pero también nos gusta buscar alguna excusa para tomar un pequeño trago. La verdad es que eso nos proporciona alegría y felicidad, dos factores que no han de faltar nunca en nuestra vida.
Buena prueba de lo que estamos hablando es lo que podemos extraer de un estudio de Statista en el que se indica cuál fue el consumo de cerveza por cabeza entre los años 2008 y 2020 en España. Vemos cómo ese consumo se mantiene en torno a los 50 litros de cerveza por persona, algo que deja claro que nos encanta una bebida como esta. No cabe la menor duda de que estamos hablando de una de las bebidas que son más codiciadas en España y que son habituales no solo en los bares y restaurantes, sino también en las casas de los españoles y las españolas.
El cava también está reportando buenas noticias en los últimos años. Y es que es una de las bebidas que más exporta de todas cuantas se fabrican en este país. Según nos indica la noticia que os acabamos de enlazar y que es propiedad del diario El Economista, España exporta el 71% del cava que produce, lo que genera una serie de beneficios que son bastante interesantes para las empresas españolas que se encargan de un producto como este. Alemania, por cierto, es el país al que más viaja el cava español, que goza de una muy buena popularidad más allá de nuestras fronteras.
El gran consumo de cerveza que hay en un país como el nuestro y la gran exportación de cava que realizan las empresas españolas han provocado que las entidades que se encargan de la producción de estas bebidas hayan tenido que reinventarse para poder asumir toda la demanda. Para ello, han necesitado confiar en una tecnología que les ha permitido asumir ese aumento de la demanda sin que eso haya ido ligado necesariamente a un aumento de los costes fijos. Los profesionales de Boada Tecnología nos han explicado que la mayoría de productoras españolas de cerveza y cava han apostado decididamente por una nueva maquinaria que haga posible esa realidad de la que estamos hablando.
Una productividad que seguirá creciendo
El índice de productividad de los empleados que trabajan en este tipo de fábricas se ha multiplicado en los últimos años gracias a esta inversión en maquinaria tecnológica moderna. Pero estamos convencidos de que esa productividad no se va a mantener ahí durante mucho tiempo y que va a seguir creciendo a pasos agigantados durante los próximos años. Y es que la gran ventaja de la tecnología es el hecho de que nos permite progresar en nuestro trabajo de manera continua.
Ni que decir tiene que ese aumento todavía más grande de la productividad que demandamos es algo que se va a conseguir de cara a los próximos años. La tecnología evoluciona y las personas se van adaptando a los requerimientos de esas nuevas máquinas con las que se confeccionan productos. Está claro que, en el caso que atañe a la cerveza o al cava, los avances están siendo significativos y seguro que de cara al futuro lo van a ser más. Las personas que trabajen en ello, después de un breve periodo de aclimatación a las nuevas máquinas, duplicarán su productividad en bastantes casos.
La tecnología es una de las cosas que ha permitido que la sociedad cambie. Así ocurrió durante la Revolución Industrial que comenzó en Inglaterra y así ocurre cada vez que, como ahora, se producen avances en las técnicas de producción. Y, normalmente, y esto es lo mejor de todo, la evolución en tecnología es algo que va asociado a avances sociales, que suelen aparecer siempre después de esos avances tecnológicos. No cabe la menor duda de que es así como se van produciendo las mejoras para la población general y las empresas. Esto es el progreso.